Esta semana hemos conocido una buena noticia. Alex Carrasco, ex jugador de Madrid Panteras, ha recalado en las filas de los Guadalajara Stings como Coordinador de Equipos Especiales, y Entrenador Asistente. Sin duda una gran noticia para nuestro club. Desde aquí le damos la bienvenida le deseamos una larga y prolífica carrera con nosotros. Publicamos una pequeña entrevista para que conozcáis un poco más a nuestro nuevo Coach.
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| Alex posando con los cascos de Madrid Panteras y Guada Stings |
1.- Alex, háblanos de tí un poco.
Antes de empezar quiero daros las gracias por permitirme formar parte del equipo y por lo bien que me habéis recibido.
Soy Alejandro Carrasco, tengo 39 años y soy de Madrid capital.
He acabado viviendo en Guadalajara por motivos laborales. Llevo 9 años trabajando en la provincia y residiendo aquí uno y medio.
Mido 1,83 metros y actualmente peso 103 kilos, aunque cuando jugaba lo máximo que llegué a pesar fueron 88 kilitos de nada. Soy licenciado en Ciencias Biológicas, por la Universidad Complutense. He sido entrenador de baloncesto a nivel escolar (máximo hasta categoría Junior).
Soy fan a muerte de San Francisco 49ers, que eran los dominadores de la NFL cuando yo empecé a seguir esto (la época de Joe Montana, Jerry Rice, Roger Craig, Tom Rathman, Brent Jones, etc.).
2.- ¿Cómo conociste el football americano y por qué te aficionaste?
Esta pregunta es difícil de contestar para mí. La verdad es que no recuerdo exactamente cómo conocí el football, supongo que, como la mayoría de la gente en aquella época, la primera vez lo vería en la televisión, en alguna película o serie, quizá incluso en los dibujos animados.
Lo que sí recuerdo es mi imagen de niño (8-9 años) correteando por el patio del edificio donde vivía, con unas hombreras de espuma (de las que se utilizan de relleno en las chaquetas: mi madre era costurera y tenía de esas cosas) metidas dentro de la camiseta y una pelota de tenis agarrada, imitando perfectamente a un Running Back, mientras decía: "yo voy a jugar al rugby americano". Todo un angelito.
También influyó mucho mi afición a los juegos de mesa, ya que mi hermano me descubrió un juego de mesa inglés llamado Blood Bowl, en el que se intentaba representar una especie de partido (mitad rugby, mitad football, más parecido a una batalla campal), jugando con equipos de orcos, humanos, elfos, enanos, etc. No hace falta decir que se convirtió en nuestro juego favorito, y todavía hoy en día seguimos jugando con él cuando podemos.
Además de esto, recuerdo con 14-15 años ver algún que otro partido con mi padre, cuando empezaban a ponerlo en la tele, sin tener ni idea del reglamento ni de qué iba el football ninguno de los dos, y quedarme alucinado con este deporte, sobre todo por la estética (parecían caballeros medievales con sus corazas y cascos), y tener claro que quería ser como ellos, quería jugar a ese deporte.
A partir de entonces, el football siempre estuvo presente en mi vida: buscaba revistas y secciones de periódicos deportivos donde hablasen de football o dijeran los resultados de la NFL; jugaba con algún amigo y con mi hermano a esos primeros juegos de ordenador tan cutres, y siempre buscábamos juegos relacionados con el football; veía todo lo que podía de lo poco que echaban en la tele de este deporte; etc.
A principios del año 1990 (tenía yo 16-17 años), Telemadrid, con sólo un año de existencia, retransmitía en diferido partidos de la NFL los fines de semana por la mañana. Recuerdo que a veces iban de comentaristas personas relacionadas con el football en España. Gracias a esto me enteré de que había equipos y gente jugando al football en Madrid. Un día los comentaristas fueron los entrenadores de dos equipos que se acababan de crear en Madrid: los Toros y los Panteras (el coach Jason). Ambos invitaron a que se acercase a algún entrenamiento quien quisiera probar. Como me gustó el nombre de Panteras y entrenaban en la Ciudad Universitaria, cerca de mi casa, me acerqué a conocerlos, pero no pude hacer las pruebas por ser menor de edad, y me convertí en fiel seguidor del equipo en los partidos que jugó esa temporada y la siguiente. En septiembre del año siguiente (1991), ya con 18 años, tras pasar las correspondientes pruebas entré en el equipo.
3.- ¿Has sido jugador de football?, ¿cuanto tiempo?, ¿en que equipo?, experiencias personales. Háblanos de aquella época. ¿De qué jugabas?, ¿con quién coincidiste?, ¿contra qué equipos jugabas?.......
Como ya he dicho en la anterior pregunta, mi primer y único equipo fue Madrid Panteras, donde jugué tres temporadas y media. En el equipo me pusieron un mote: me llamaban BARRICADA, porque un sábado por la mañana fui a entrenar, hecho unos zorros y resacoso, después de haber ido la noche anterior a un concierto de ese grupo y salir de juerga.
Guardo muy buenos recuerdos de aquella época, a pesar de lo complicado que fue poder cumplir mi sueño de jugar a este deporte. Por ejemplo, las protecciones me las compré ahorrando poco a poco hasta que tenía dinero suficiente para comprarme algo; o el hecho de que siempre iba a entrenar y a los partidos en transporte público, por lo que era un cuadro ir en metro o autobús con las protecciones de las piernas puestas y la coraza y el casco al hombro (la gente me miraba extrañada). Tuve mala suerte porque justo dejé el equipo el año que empezaron a ganar todos los títulos posibles (temporada 94-95), eran unos máquinas: el mejor equipo español de football de todos los tiempos.
Aquella época fue la de mayor repercusión social, y la más espectacular de este deporte en España. Lo que yo recuerdo es que eran los comienzos de este deporte en España y todo se hacía con mucha ilusión, por lo menos en Panteras. Se consiguieron muchas cosas: retransmitían los partidos de nuestra liga SFL (en diferido) por la televisión Antena 3; la NFL intentaba expandirse por el mundo y creó la liga mundial, con un equipo profesional en Barcelona (los Dragons); incluso se publicaba una revista dedicada en exclusiva al football (100 yardas); la primera televisión española de pago, Canal +, emitía en exclusiva la NFL, con una retransmisión espectacular de la SuperBowl; etc. En alguna final de liga se llegaron a juntar más de 11.000 personas en el estadio (Estadio Olímpico de Montjuic) para ver el espectáculo. Para que la gente se haga una idea de la importancia de este dato, mencionar que en el estadio del equipo de fútbol de Guadalajara (actualmente en la segunda división nacional) caben unas 8.000 personas, y en estadios de equipos de primera división como el del Rayo Vallecano o el del Getafe caben alrededor de 15.000 espectadores. Desconozco qué pasó a nivel organizativo para que se perdiera todo eso, pero es una pena, la verdad.
Mi experiencia como jugador de football americano la recuerdo con agrado, pero tiene luces y sombras. En el lado positivo, jugué con todas las ganas, toda la ilusión y toda la fuerza que me daban mi pasión por este deporte y la juventud y el físico de mis 18- 20 años, en el mejor equipo español y con algunos de los mejores jugadores españoles de la historia. En el lado negativo, tener que aprender por mi cuenta y casi por supervivencia, y tener que dejar de jugar por los motivos por los que lo hice. Quitando a mi primer entrenador (Otis Wilye) y sus ayudantes, me da rabia no haber tenido entrenadores que me enseñaran bien los fundamentos y movimientos básicos para jugar, y que dedicasen algo de tiempo y entrenamientos específicos a los más novatos. Panteras no esperaba a nadie y era un equipo de élite, destinado a hacer historia; por eso los entrenadores que tuve se dedicaban a mejorar a los jugadores titulares y a sus mejores suplentes; el resto de jugadores nos teníamos que poner las pilas por nuestra cuenta, si queríamos tener siquiera la oportunidad de entrar en las rotaciones de los partidillos de los entrenamientos. No digo esto como un reproche al equipo, sino expresando una pequeña decepción personal, ya que estoy convencido de que hubiera podido jugar más y mejor si hubiera tenido la opción de aprender poco a poco, desde la base.
En cuanto a mi retirada, ese año se juntaron tres factores que hicieron que abandonase esta pasión: los estudios en la universidad no iban todo lo bien que deberían, por lo que tuve que faltar a algunos entrenamientos del principio de temporada; cuando volví a entrenar, había un entrenador nuevo que a varios de los suplentes no nos dejaba ni participar en los entrenamientos de jugadas, y prácticamente me tiré más de un mes yendo a ver cómo entrenaban los demás; para rematar, en el último entrenamiento que hice con los Panteras, me lesioné en el hombro izquierdo, una rotura fibrilar bastante puñetera, que estuve arrastrando hasta más de dos años después. Por eso, con todo el dolor del mundo, decidí dejarlo.
Jugué siempre en defensa, de Outside Linebacker, aunque en los partidos jugaba más en el Kick Off Team, tercer o cuarto jugador desde la banda derecha, y creo que se me daba bien, porque llegaba de los primeros al placaje la mayoría de las veces.
Mi "palmarés", si se puede denominar así, es breve, ya que como he dicho, empezaron a ganar todo después de mi retirada: Subcampeón de tres ligas nacionales (dos SFL y una AFL) y Campeón del Trofeo San Isidro de Getafe (partido que recuerdo con especial cariño, porque jugué casi todo el partido de Linebacker y realicé la única anotación de mi carrera: un safety). Casi llevo con más orgullo poder decir dos cosas: soy un Pantera, y soy uno de los primeros 500 tipos que jugó a este deporte en España.
En cuanto a jugadores con los que coincidí en Panteras, por mencionar algunos: Pedro Garau, Cacho Martínez- Conde, los Pitbull (Álvaro y Marcos Moreno), mi ídolo en el equipo: Quique Fontecha, los hermanos Varela (Rafa y Gonzalo), Rambo, Luisi Rivera, Andrea Zanoni y Guillermo Gómez- Sancha (que se vinieron al equipo después de dejar los Osos), Kikón, Javi Tocho, Mallols, etc. Por añadir un detalle de la calidad que tenían los jugadores de Panteras: en la Selección española del año 1997, de los 46 seleccionados, 17 eran jugadores de Panteras (más de un tercio), y cuatro de ellos jugaban de Linebackers en mi época (éramos 6 Linebackers). Impresionante, ¿verdad? De jugadores rivales no recuerdo muchos nombres, así que prefiero no nombrar a ninguno y decir alguno de los equipos con los que me enfrenté: Osos (primer equipo que se formó en Madrid), Toros, Howlers de Barcelona (jugar contra ellos era, con perdón, el Madrid- Barça del football americano español), Diesel Jeans Eagles de Vilafranca (nos ganaron una final), Linces de Sevilla, Bilbao Knights, Zaragoza Lions, etc.
4.- ¿Qué intenciones tienes con el proyecto Stings y cuáles son tus objetivos para esta temporada?
Me llevé una gran alegría cuando me enteré de que existía un equipo de football en Guadalajara. Fui a veros a un partido al final de la temporada pasada, y ya me volió a picar el gusanillo. Os he seguido por internet, en esta página web, y cuando supe que empezabais a entrenar esta temporada, me acerqué a conoceros, y aquí estoy.
Las intenciones están claras: echaros una mano en lo que pueda, y tratar de que el proyecto Stings siga adelante. De momento me conformo con ayudar en los entrenamientos, dando algunos consejos a los jugadores, sobre todo de técnica individual.
Mis objetivos personales son dos: aprender todo lo que pueda de labores de entrenador, ya que esta faceta es totalmente nueva para mi, y recuperar la forma física suficiente, para intentar volver a jugar a medio plazo. En cuanto al equipo, todavía es pronto para marcarme objetivos, ya que desconozco muchos aspectos (competitividad, grado de coordinación, diseño del playbook, etc.), pero a grandes rasgos, espero ayudar a que el equipo sea cada vez mejor equipo y más competitivo.
5.- ¿Podrías volver a calzarte unas botas y saltar al campo? Te gustaría?
Me encantaría, me volvería loco... Llevo 18 años sin jugar, y 6 años que casi no he hecho ejercicio ni he jugado a ningún deporte, por lo que veo difícil volver a estar a punto para jugar a football. Pero no me rindo. Creo que esta oportunidad que me ofrecéis en los Stings, a mi edad va a ser mi última oportunidad para volver a jugar, para notar las sensaciones de un partido, de un placaje o un bloqueo. En los entrenamientos estoy aprovechando para reactivar la maquinaria, haciendo con vosotros el calentamiento y la parte de físico, pero además voy poco a poco entrenando por mi cuenta. Preferiría no marcarme plazos, pero creo que es bueno marcarse un objetivo, y el mío es intentar estar preparado para dentro de tres o cuatro meses poder participar en algún partidillo o en algún ejercicio en los entrenamientos.
6.- ¿Crees que el equipo tiene posibilidades por lo que has visto hasta ahora?
Por supuesto. El equipo está en formación, pero veo gente con muchas ganas y muy implicados en el equipo. En su mayoría son gente que está aprendiendo, y por tanto queda mucho trabajo por delante para todos, para mi el primero. Pero el grado de implicación que veo en los jugadores, viniendo a entrenar y echándole ganas en cada entrenamiento, me hace ser optimista y pensar que podemos ir limando los fallos y convertirnos en un buen equipo de football.
He de felicitaros a los que estáis tirando del carro desde el principio. Habéis conseguido material propio del equipo (equipaciones y material de entrenamiento), se entrena en un campo de hierba artificial y con vestuarios, tenemos patrocinadores, una página web, un grupo de unos 20- 25 jugadores más o menos fijo,... De verdad que, comparado con mis comienzos en Panteras, lleváis mucho recorrido ganado. Nosotros nos tiramos mucho tiempo entrenando en un campo de fútbol de tierra de un parque público, sin vestuarios y sin material de entrenamiento, y a veces esquivando niños jugando o gente paseando perros.
En un momento dado, quizá esta misma temporada, deberíamos plantearnos entre todos qué queremos conseguir como equipo: si queremos llegar a jugar en las ligas nacionales, y en qué modalidad (7x7, 9x9, 11x11). Si apostamos fuerte por el proyecto, cada uno de nosotros (entrenadores y jugadores) debería subir varios peldaños en cuanto al grado de seriedad, intensidad y esfuerzo de los entrenamientos.
Por otro lado, sería muy importante que se apuntara más gente al equipo. Si pudiéramos contar con unos 35- 40 jugadores fijos, que vinieran a todos los entrenamientos, podríamos asignar posiciones específicas a cada jugador, y que nadie doblase en defensa y ataque en un partido (salvo por causas excepcionales). Con esto se lograría que los jugadores cada vez jugasen mejor en su posición, y que se conjuntasen los equipos de ataque y de defensa (coordinación de las líneas, defensa en zona, memorizar el playbook, etc.).
7.- ¿Qué le dirías a los aficionados para que se acerquen a conocer este deporte y este equipo y se unan a nosotros?
Lo primero, que vengan a ver y a escuchar un entrenamiento. El sonido de los bloqueos y los placajes es algo que engancha.
Que es el mejor deporte que existe, y el más completo. No es necesario ser un "armario empotrado" o un bestia para jugar, sino que hay que estar al cien por cien del físico que tengas. Que un equipo necesita gente de todo tipo: altos y bajos, fuertes y delgados, rápidos y lentos, gente que vaya bien con las manos y alguno que vaya bien con los pies, etc. Es cuestión de probar y ver a qué posición se adapta mejor cada uno.
Es un deporte muy explosivo (se juega a tope cada jugada, que duran pocos segundos) y muy estratégico (hay muchos tipos de formaciones, jugadas, etc.), por lo que se juntan un buen físico con un buen coco.
En los Stings hay gente con algo de experiencia en el football, pero también hay gente que todavía no ha jugado un partido nunca. Por tanto quien venga de nuevas no va a sentirse desplazado, le vamos a enseñar a jugar y va a aprender con el resto de jugadores en todos los entrenamientos. El ambiente dentro del equipo es muy bueno, por lo que he podido comprobar, y hay gente de diferentes edades entre los 17 años y los 39 que tengo yo. Además, haciendo una coña con la promoción más reciente del equipo, tendrán posibilidades de salir en la televisión, aunque sea bailando una canción de Mika.
